viernes, 9 de enero de 2015

Acojonados para la vuelta

Me voy a atrever con lo que nunca he hecho, voy a dar mi visión del partido de ayer sin ver ni un solo minuto del mismo.
Al final es lo de siempre. Tendremos que ir con las carnes abiertas al partido de vuelta para intentar meternos en la siguiente ronda.
Al final hay que reconocer que hay futbolistas a los que se les va la fuerza por la boca. Montan un pollo delante de todo el mundo y cuando tienen la oportunidad de callar bocas la cagan de una forma lamentable dejando al aire todas sus vergüenzas.
Mención especial merece el tema de la portería. Por todos es sabido que jugamos desde hace mucho tiempo sin porteros. Lo de ayer es una muestra más. ¿Hasta cuando durará este martirio?
Al final lo de siempre, una decepción más y van...
Al menos no perdí el tiempo viendo semejante bochorno y saqué provecho viendo en su lugar el Granada-Sevilla.
Ahí pude comprobar como el equipo sevillista supo sacar un buen resultado para el partido de vuelta. El 1-2 frente a un Granada muy inferior, donde no se aprecia por ningún lado el sello de los equipos de Caparrós, deja la eliminatoria casi resuelta. Digo casi porque esto es fútbol y nunca hay que fiarse, pero visto lo visto no debe haber mayor problema.
Allí me gustò la actitud de Iago Aspas, quien a pesar de la paja mental que han querido montar por unas imágenes de lo mas normal en el mundo del fútbol (vaya tela el daño que está haciendo el padel) fue capaz de ponerse de gol hasta tres veces en la media hora escasa de la que dispuso en el partido. No solo eso, sino que no dudó en servir a otros compañeros a la hora de terminar jugadas cuando la ansiedad lógica por la polémica inventada pudo obligarle a ser mas egoista. Quizás sea la ventaja de poder contar con un "tercer" delantero con las garantías suficientes para afrontar las tres competiciones.
En la portería jugó un joven guardameta procedente de la cantera. Seguramente pudo hacer mas en el gol que encajó en el último suspiro del partido, pero ese lunar no debe empañar el partido tan serio que realizó, transmitiendo seguridad en todo momento a sus compañeros y afición.
Seguro que con una afición tan entendida saben apoyarlo en esos pequeños detalles y pueden ver al gran guardameta que se presume.
Mientras nosotros deberemos de seguir tragando y tragando. Hice bien en no ver el partido, no hubiese soportado el que visteis algunos, que a buen seguro no era el que yo vi.

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